Educación e inclusión de la mano de las tecnologías
02-ene-2023
La educación en el mundo de hoy tiene un protagonista esencial: la tecnología. Entornos incluyentes requieren aulas incluyentes
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El Ministerio de Tecnologías de la información y las Comunicaciones pone a disposición la descarga gratuita de los software JAWS y ZoomText para personas con discapacidad visual.
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Gracias a estos software las personas con discapacidad visual pueden eliminar barreras de acceso y uso de la tecnología.
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Al instalar JAWS en un computador, las personas con discapacidad visual podrán escribir y editar textos, hacer uso de cualquier programa con diseño accesible, como los de Microsoft Office (Word, Excel, Power Point), navegar en páginas de internet e interactuar en redes sociales como Facebook, Twitter, YouTube, entre otras.
Las vacaciones han finalizado y con ello inicia una nueva etapa en los entornos educativos del país, el primer semestre académico de 2024. En Colombia, según un informe del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) existen más de nueve millones de estudiantes en instituciones de educación básica y secundaria. Al tiempo, según el Sistema Nacional de Información de Educación Superior del Ministerio de Educación Nacional, para el año 2022 el total de estudiantes en educación superior sumó más de 2.4 millones.
Basado en ese panorama, hay una pregunta que como sociedad debemos hacernos con más frecuencia: ¿somos verdaderamente incluyentes en los entornos académicos del país? Pues bien, esta es una respuesta que contiene responsabilidades desde todas las aristas.
Y es que en el entorno de educación básica y media en el país hay más de 183 mil estudiantes con discapacidad matriculados y el número de estudiantes con discapacidad en instituciones de educación superior constituye un porcentaje que nos obliga a hablar de cómo hacer que estos escenarios académicos puedan ser inclusivos gracias a la tecnología y la concientización de todos como actores importantes en la sociedad.
La educación en el mundo de hoy tiene un protagonista esencial: la tecnología. Entornos incluyentes requieren aulas incluyentes, es por ello que las herramientas digitales pueden marcar el camino para empezar a dar luces de inclusión en cada rincón académico. Un aspecto fundamental es el de reconocer los aspectos tecnológicos más básicos para adentrarse en otras materias complejas.
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Para dar una mano a todos esos escenarios académicos MinTIC ha puesto en marcha una estrategia orientada a garantizar la comunicación y el acceso a las TIC de las personas con discapacidad con el fin de promover y facilitar su participación activa en la sociedad mediante el uso de los software JAWS y Zoomtext.
La participación que busca MinTIC es uno de los pilares para hacer de los entornos educativos lugares más incluyentes, ya que según el Índice de Educación Inclusiva de la Educación Superior del Sistema Nacional de Información de Educación Superior SNIES, existen seis elementos que, en conjunto, representan la educación inclusiva: La participación, La diversidad, la interculturalidad, la equidad, la calidad y la pertinencia.
Diana Garavito, especialista con maestría en Discapacidad e Inclusión Social y referente de educación inclusiva, nos da tres elementos básicos para que las aulas se vuelvan más incluyentes:
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Tener claro el concepto de inclusión y que todos tengamos la misma concepción: inclusión no es solo discapacidad, y hablar en el marco de la educación y la equidad para garantizar una atención educativa pertinente, oportuna y de calidad, requiere que se trabaje de manera articulada y que en todos los sectores se respete esa diversidad, que se trabaje por superar las barreras que están en el entorno. La inclusión en la educación es un proceso permanente de transformación para que todos y todas puedan participar de entornos inclusivos y así garantizar apoyos y ajustes como parte de un enfoque de derechos.
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Los equipos deben estar dispuestos, capacitarse es fundamental en las aulas, todos los docentes están preparados en pedagogía y didáctica, sin embargo, se requieren implementar estrategias de participación para acceder al conocimiento y superar las barreras que no están en las personas con discapacidad sino en el entorno en que se desenvuelven, entender que todos los estudiantes tienen la capacidad de aprender en el marco de un abordaje de inclusión y equidad en la educación. Si no tenemos una sociedad inclusiva es muy difícil que la educación sea inclusiva. El reto es de todos y todas. Eso lo deben entender las familias, los equipos docentes, los rectores y la sociedad en general.
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La tecnología como una herramienta e insumo que permite garantizar acceso a la educación y la inclusión, pero es esta misma debe estar aunada a la formación, softwares y recursos. Comprender que es importante que todos puedan participar en ambientes de aprendizaje común, que todos y todas tenemos derecho a la educación y a compartir en ambientes de aprendizaje, y si lo hacemos, que sea con herramientas digitales basados en estrategias pedagógicas, respeto y participación, es decir, no segregados, no excluyentes, no por categorías. Entender que hablar de inclusión es poder garantizar a todos y todas en el marco de la diversidad y con los apoyos y ajustes que requieren, podemos estar allí en las aulas, no solo para acceder, sino para permanecer y avanzar en el sistema educativo, para lograr los aprendizajes y para ser respetados, para entender que hay elementos de convivencia que también nacen en el marco del respeto por ese otro. Haciendo uso responsable de las tecnologías de la información y las comunicaciones se puede avanzar en el propósito.
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Estos elementos nos ayudan a romper las barreras para lograr una verdadera transformación digital accesible en las aulas, adoptando medidas para generar inclusión y mejorar la calidad de vida en términos de autonomía e independencia a través de las TIC en las personas con discapacidad. Maestros, estudiantes y sociedad estamos llamados a aportar nuestro granito de arena para lograr mayor inclusión.
Ahora que conoces elementos representativos y recomendaciones para hacer de las aulas del conocimiento algo más incluyente ¿qué esperas para ponerlo en práctica en tus entornos